miércoles, 25 de septiembre de 2013

El Perú Pre-Colombino • I


     Trasladémonos, como en sueños, al Perú antiguo, al Perú pre-colombino, a ese Perú que todavía vivía libre de la influencia represiva de los españoles...

     Aquí, las distintas civilizaciones pre-incaicas estaban estrechamente ligadas, si bien cada una retenía su independencia y características peculiares.

     El habitante de esta época dejó constancia de su forma de pensar en sus trabajos de alfarería, es decir, en vasos y huacos hechos de arcilla.

     En un funeral, por ejemplo, después de colocar al difunto en su tumba, le agregaban una serie de ofrendas (...bueno, hasta aquí, probablemente nos lo enseñaron en el colegio), pero también le ponían un vaso y un huaco con alegorías eróticas, al igual que otros vasos como homenaje póstumo. Esto es porque los amigos y parientes del difunto creían que de esta forma el ser que pasaba a mejor vida seguiría disfrutando de los placeres que ofrece el sexo.

 
     Los tributos fúnebres tenían como inspiración la creencia de la supervivencia del alma después de la muerte, la fe en la inmortalidad del espíritu, la continuación de la vida más allá de la tumba. Nuestros antepasados creían que era una diversión alegre el viaje final al mundo desconocido.

     Los primeros vasos que aparecieron en la Costa del Perú en el año 800 a.C., en la llamada Era de Formación o Desarrollo, pertenecieron a las civilizaciones de Vicus, Piura, Virú y Salinar. Los temas eróticos más comunes son los vasos que tienen el cuello de vasija para beber que simulan penes a través de los cuales sale el líquido. En el valle de Chicama, los artistas pertenecientes a la civilización Salinar nos representan escenas de amor y de relaciones sexuales, que querían simbolizar la felicidad que se experimenta realizando un acto tan placentero y natural.

     El doctor Kinsey, sexólogo norteamericano, reconocido mundialmente en nuestro tiempo, concedía gran importancia a las obras de alfarería de Salinar, a las que él consideraba el mejor trabajo de erotismo en el mundo.

     Por todo esto, el Perú es el centro más importante para el estudio del erotismo en América y, uno de los más importantes en el mundo entero.

 

jueves, 19 de septiembre de 2013

¿Cómo usar el Condón?


 
Los preservativos o condones son un invento milenario. En la antigüedad se fabricaban con vejiga de rana o intestino de cerdo u oveja. Desde 1930 empezaron a usarse los condones fabricados de látex y en 1997, la FDA aprobó cinco nuevos tipos de condones sintéticos que ofrecen más sensibilidad y confort, aunque la efectividad del látex frente a estos últimos aún continúa siendo mayor.

Los puedes encontrar en farmacias, gasolineras y en algunos casos en baños públicos.

Deben almacenarse siempre en un lugar seguro y fresco donde no les llegue sol ni se recalienten, por eso, no es una buena idea guardarlos en la billetera ni en la guantera del auto.

 

La mayoría de los preservativos ya vienen lubricados de fábrica, sin embargo, evita emplear los que contengan nonoxinol-9 ya que pueden producir irritaciones. Si lo deseas, puedes utilizar un lubricante adicional en el exterior del condón, siempre que sea en base a soluciones de agua, con lo cual no irritarán a tu pareja. Jamás uses los lubricantes basados en petróleo, aceites o jaleas, ya que éstos descompondrán el látex y dañarán el preservativo.
 
Es muy importante usar el preservativo correctamente, pues de ello dependerá que te brinde la protección adecuada.

Para ponerte el preservativo el pene tiene que estar erecto.

Corre levemente el prepucio hacia atrás, y luego, sosteniendo con dos dedos la punta del condón (para evitar que se forme una burbuja de aire, que podría romper el preservativo) ubícalo sobre el glande y deslízalo suavemente con la otra mano por sobre el pene, hasta llegar al final.
 
Ten cuidado de no rozarlo con anillos, pulseras o las uñas, que podrían ocasionarle pequeños rasgones.

Mantén el condón firmemente sujeto a tu pene hasta que eyacules. Luego, retírate suavemente del interior de tu pareja, quita cuidadosamente el condón y hazle un nudo en la abertura, para después desecharlo.

Utiliza un condón nuevo en cada coito que realices o también si la fricción se prolonga.
 
 

viernes, 13 de septiembre de 2013

El Lenguaje Erótico


 
     Por más relaciones sexuales que se haya tenido, es fundamental conocer el propio cuerpo y el de la pareja, porque de esa manera funcionarán más acorde, complementándose mutuamente.
 
     Y, la verdad, es que no hay nadie mejor que uno mismo para conocer su propio cuerpo y, por lo mismo, es uno quién mejor sabe lo que quiere; por tanto, resulta lógico compartir abiertamente con la pareja esas cosas (sin abrumarle con exigencias).
 
     Lo que debes tener en cuenta es que tu pareja no es un mago capaz de adivinar tus deseos. Es importante darle, cuando menos, una pista para que descubra cuáles son.

     Dentro del lenguaje sexual, posiblemente el más dificultoso es el que se expresa con palabras. Lo que ocurre es que por mucho tiempo, la mayoría de personas fueron criadas en ambientes donde las palabras sexuales eran absolutamente prohibidas.
 

     Los hombres juegan, desde su adolescencia, con la fantasía de mencionar sus genitales y se sienten cómodos nombrándolos. Sin embargo, las mujeres se han visto enfrentadas a problemas para asumir una actitud similar. Con algunos cambios culturales, estas costumbres se han ido revirtiendo y ahora las cosas son distintas...

     Otro efecto de las palabras en el lenguaje del sexo es que provocan una gran excitación cuando se las utiliza mientras se está haciendo el amor. En general, el hecho de que se hable en esos momentos reasegura el vínculo que se está teniendo con la otra persona, y también da la oportunidad a la pareja para expresarse de la manera que desee.
 
     El lenguaje empleado dentro de las situaciones sexuales puede tener distintas formas. Para algunos es excitante que les digan palabras o frases cariñosas, para otros pueden ser excitantes algunos términos directos relacionados con el acto sexual en sí. Hay también los que prefieren términos más atrevidos o algún sonido que demuestre el goce, porque esa es la manera de realimentarse. En fin, todo esto corresponde a una forma de comunicación que cada cual debe explorar.